Despues de dejarlo casi para el final, nos decidimos a enfrentar el frio mortal de la tarde del pasado martes, y asistimos a la bellisima muestra que el museo Solomon R. Guggenheim de Nueva York presento hasta el dia de hoy, y desde el pasado Septiembre, de la obra de Wassily Kandinsky(1886-1944), primerisima figura del arte del siglo XX y una de las piedras angulares del movimiento abstracto, campo de experimentacion donde se probaron de manera casi incansable diferentes maneras de expresar, en este caso atraves de la pintura, la nueva manera de ver la realidad, propia de los individuos que vivieron y crearon en la sociedad configurada por la Revolucion Industrial.
Y tambien esta el edificio, por supuesto, uno de los museos mas famosos del planeta, uno de los edificios mas representativos de la ciudad de Nueva York, comisionado para albergar la coleccion del filantropo Salomon R. Guggenheim, a uno de los grandes maestros de la arquitectura Americana y universal, Frank Lloyd Wrigth. El museo, cuya construccion tardo 16 años(de 1943 a 1959) y que representa el resultado de uno de los procesos de evolucion estilistica mas complejos del arquitecto, fue creado para amplificar la experiencia de mirar las obras de arte y la interaccion con las mismas mediante el recorrido ascendente claramente delimitado (pero no exclusivo, en el sentido de que no es el unico a seguir) por su camino en espiral y que culmina con el gran domo, principal fuente de luz para el interior. La muestra esta organizada entonces para seguir esta disposicion, lo que permite apreciar a Kandinsky desde sus primeras obras, imagenes que parecen ilustrar cuentos de hadas, con personajes y paisajes en remembranza de su Rusia natal, y realizados con la tecnica puntillista, en donde ya hay atisbos de su interes obsesivo por el color, y desde donde continua desarrollandose, en un compendio que nos enfrenta al proceso monumental de plasmar una vision: desde las pequeñas telas donde representa en estudios rapidos bien sea una plaza de Munich, o una calle de Amberes, pasando por las secuencias de lienzos donde comienza a constituirse el proceso de estilizar las formas hasta que solo son vagamente reconocibles y utilizar los tratamientos inusuales del color con la intencion de estimular una respuesta emocional distanciada de las referencias puramente visuales (o retinales como las llamaria Duchamp), como por ejemplo en "Composicion VII" de 1919, hasta las obras que definen el culmen de su busqueda formal y coloristica, y que exhiben la exquisita precision en el dibujo y la aplicacion del color, sobre todo en las acuarelas y temperas que sirvieron como estudios previos a los grandes cuadros de este periodo, denominado indistintamente como "Abstraccion Biomorfica" o de la Gran Sintesis, donde la geometria se convierte en un medio de transmitir su idea de lo arcano y del tiempo, y las figuras comienzan a constituir conglomerados que se nos antojan partituras de musica o a bloques de textos en lenguajes antiguos, relatando siempre su intencion de hacer visible la estructura interna de la realidad (uno de los principales fundamentos de la abstraccion) y su deseo constante de incitar a una emocion que nos relacione con lo espiritual.
A medida que vamos ascendiendo conocemos mas de Kandinski, quien probablemente hubiera aprobado esta manera de disponer su obra para ser vista por el publico, en el sentido de la ascencion en espiral hacia la luz (el gran domo). Kandinsky era no solo pintor sino tambien profesor, teorico de arte y filosofo, una persona con un interes muy profundo por lo mistico, al que dara forma expresandolo atraves de la abstraccion (se considera a Kandinsky como el creador de la primera pintura puramente abstracta, tal como lo entiende la historia del arte occidental) y que estaba inspirado por el discurso del Movimiento Teosofico de finales del siglo XIX, que propone la Creacion como una progresion geometrica que se sucede atraves de secuencias de circulos, cuadrados y triangulos que representan su esencia creativa, doctrina que influyo no solo su pintura sino tambien sus escritos y "tratados" sobre arte, como el famoso "Punto y Linea al Plano" de 1926. Como dato curioso, el Movimiento Teosofico fue fundado por la medium Madame Blavatsky, famosa en los circulos de sociedad europeos de fines del XIX por su "capacidad" para conjurar los espiritus de los difuntos y por ende promocionada como vocera del Mas Alla (aunque por supuesto con una que otra ayudita mundana, como bien lo comprobaron en su tiempo algunos detectives asiduos a desenmascarar a dichas "clarividentes"). Esto me hace reflexionar acerca de los contrastes en la propia persona de Kandinsky, que revelan su constante busqueda, y que contribuyen a hacer mas fascinante al individuo; Kandinsky participo de los principales movimientos del arte Moderno, que definieron al mismo en la primera mitad del siglo pasado, el Post-Impresionismo, el Fauvismo, el Expresionismo, al fundar el grupo del Blaue Reiter(Jinete Azul) junto a August Macke y Franz Marc, y posteriormente la Bauhaus, ya que su discurso pictorico e intelectual formaba parte esencial de la cultura de principios de siglo hasta la Segunda Guerra Mundial. Este fue el hombre que en sus treintas abandono su exitosa carrera de Economia y Leyes para dedicarse a pintar y se convirtio en uno de los maestros del Arte universal en la Pre-Guerra, el mismo hombre que, segun relata el reciente libro de Nicholas Fox Weber(y reseñado por John Simon para el New York Times) acerca de la Bauhaus, abandono a la intelectual y talentosa pintora Gabrielle Munter, que era su amante, para "casarse a mediana edad con su bonita pero ignorante sirvienta de 19 años de edad, Nina, que lo adoraba miserablemente...". Pero de todas maneras, como bien nos lo ilustra el caso de Madame Blavatsky, nadie es perfecto....
La muestra del Guggenheim viene completa con una sala lateral en la que se exponen un gran numero de acuarelas y temperas de pequeño formato, coleccion tan extensa en tiempos de ejecucion como la de las pinturas, y que permiten una aproximacion mas intima a la manera de Kandinski de componer formalmente, a su trazo y a la manera casi perfecta de aplicar el color. Tambien hay fotografias, textos murales y cronogramas y como si no fuera suficiente, tenemos la ayuda de dispositivos portatiles de audio atraves de los cuales podemos escuchar lecturas relacionadas con diferentes partes de la exposicion, mientras seguimos el trayecto que parece dictado por la voluntad del propio edificio y que nos lleva a encontrarnos casi sin darnos cuenta con uno de los beneficios agregados, el pasillo curvo donde se exponen obras selectas de la coleccion Tannhauser, y donde tenemos la oportunidad de encontrarnos a otros viejos conocidos, Picasso, Degas, Renoir, Monet, Cezanne, Toulouse-Lautrec, Pisarro, Gaugin, y, en uno de mis momentos favoritos, en la unica pared recta, un pequeño lienzo de Van Gogh, "Le Viaduct", donde una figura solitaria espera en la semipenumbra del tunel de una via superior, sin atreverse a salir a la luz, y que me trajo a la mente la soledad extrema a la que se vio sometido Van Gogh, la misma que nos acecha en ocasiones. O, avanzando siempre, el salon semicircular donde cuelgan obras de los expresionistas, Kandinsky, por supuesto, y junto a el cuadros de Franz Marc, Kirchner y Chagall; Ya me iba dando la impresion de que el Guggenheim era una especie de monstruo mitologico gigante, una quimera blanca, que nos relataba la parabola del inicio del Arte Moderno; y al ver todas las obras, y los nombres, en frente de nosotros, despues de solo verlas en reproducciones de libros desde la niñez, senti lo que me imagino debio sentir Madame Blavatsky al escuchar los susurros de las voces de gente muerta hace mucho tiempo atras. No todos los dias tiene uno la oportunidad de ver la obra de toda una vida, que te cuenta el relato del compromiso incansable, o de ver a un edificio cumplir su cometido de una manera tan perfecta, verlo revelar el espacio y el presente de una manera tan clara. Definitivamente, era como para no perderselo, las experiencias sublimes no son cosa de todos los dias...
A medida que vamos ascendiendo conocemos mas de Kandinski, quien probablemente hubiera aprobado esta manera de disponer su obra para ser vista por el publico, en el sentido de la ascencion en espiral hacia la luz (el gran domo). Kandinsky era no solo pintor sino tambien profesor, teorico de arte y filosofo, una persona con un interes muy profundo por lo mistico, al que dara forma expresandolo atraves de la abstraccion (se considera a Kandinsky como el creador de la primera pintura puramente abstracta, tal como lo entiende la historia del arte occidental) y que estaba inspirado por el discurso del Movimiento Teosofico de finales del siglo XIX, que propone la Creacion como una progresion geometrica que se sucede atraves de secuencias de circulos, cuadrados y triangulos que representan su esencia creativa, doctrina que influyo no solo su pintura sino tambien sus escritos y "tratados" sobre arte, como el famoso "Punto y Linea al Plano" de 1926. Como dato curioso, el Movimiento Teosofico fue fundado por la medium Madame Blavatsky, famosa en los circulos de sociedad europeos de fines del XIX por su "capacidad" para conjurar los espiritus de los difuntos y por ende promocionada como vocera del Mas Alla (aunque por supuesto con una que otra ayudita mundana, como bien lo comprobaron en su tiempo algunos detectives asiduos a desenmascarar a dichas "clarividentes"). Esto me hace reflexionar acerca de los contrastes en la propia persona de Kandinsky, que revelan su constante busqueda, y que contribuyen a hacer mas fascinante al individuo; Kandinsky participo de los principales movimientos del arte Moderno, que definieron al mismo en la primera mitad del siglo pasado, el Post-Impresionismo, el Fauvismo, el Expresionismo, al fundar el grupo del Blaue Reiter(Jinete Azul) junto a August Macke y Franz Marc, y posteriormente la Bauhaus, ya que su discurso pictorico e intelectual formaba parte esencial de la cultura de principios de siglo hasta la Segunda Guerra Mundial. Este fue el hombre que en sus treintas abandono su exitosa carrera de Economia y Leyes para dedicarse a pintar y se convirtio en uno de los maestros del Arte universal en la Pre-Guerra, el mismo hombre que, segun relata el reciente libro de Nicholas Fox Weber(y reseñado por John Simon para el New York Times) acerca de la Bauhaus, abandono a la intelectual y talentosa pintora Gabrielle Munter, que era su amante, para "casarse a mediana edad con su bonita pero ignorante sirvienta de 19 años de edad, Nina, que lo adoraba miserablemente...". Pero de todas maneras, como bien nos lo ilustra el caso de Madame Blavatsky, nadie es perfecto....
La muestra del Guggenheim viene completa con una sala lateral en la que se exponen un gran numero de acuarelas y temperas de pequeño formato, coleccion tan extensa en tiempos de ejecucion como la de las pinturas, y que permiten una aproximacion mas intima a la manera de Kandinski de componer formalmente, a su trazo y a la manera casi perfecta de aplicar el color. Tambien hay fotografias, textos murales y cronogramas y como si no fuera suficiente, tenemos la ayuda de dispositivos portatiles de audio atraves de los cuales podemos escuchar lecturas relacionadas con diferentes partes de la exposicion, mientras seguimos el trayecto que parece dictado por la voluntad del propio edificio y que nos lleva a encontrarnos casi sin darnos cuenta con uno de los beneficios agregados, el pasillo curvo donde se exponen obras selectas de la coleccion Tannhauser, y donde tenemos la oportunidad de encontrarnos a otros viejos conocidos, Picasso, Degas, Renoir, Monet, Cezanne, Toulouse-Lautrec, Pisarro, Gaugin, y, en uno de mis momentos favoritos, en la unica pared recta, un pequeño lienzo de Van Gogh, "Le Viaduct", donde una figura solitaria espera en la semipenumbra del tunel de una via superior, sin atreverse a salir a la luz, y que me trajo a la mente la soledad extrema a la que se vio sometido Van Gogh, la misma que nos acecha en ocasiones. O, avanzando siempre, el salon semicircular donde cuelgan obras de los expresionistas, Kandinsky, por supuesto, y junto a el cuadros de Franz Marc, Kirchner y Chagall; Ya me iba dando la impresion de que el Guggenheim era una especie de monstruo mitologico gigante, una quimera blanca, que nos relataba la parabola del inicio del Arte Moderno; y al ver todas las obras, y los nombres, en frente de nosotros, despues de solo verlas en reproducciones de libros desde la niñez, senti lo que me imagino debio sentir Madame Blavatsky al escuchar los susurros de las voces de gente muerta hace mucho tiempo atras. No todos los dias tiene uno la oportunidad de ver la obra de toda una vida, que te cuenta el relato del compromiso incansable, o de ver a un edificio cumplir su cometido de una manera tan perfecta, verlo revelar el espacio y el presente de una manera tan clara. Definitivamente, era como para no perderselo, las experiencias sublimes no son cosa de todos los dias...
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